Estos son las razones que te recomendamos
Uno de los principales atractivos de nuestros destinos econáuticos es, sin duda, el Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas. Compuesto por cuatro archipiélagos (Cíes, Cortegada, Ons y Sálvora), este enclave de especial protección cuenta con unos ecosistemas costeros, litorales y submarinos únicos.
Precisamente estos últimos son los que resultan de mayor interés para las personas amantes del submarinismo. La extraordinaria riqueza marina de los distintos archipiélagos radica en sus aguas ricas en nutrientes que unidas a las corrientes marinas y estuáricas y a la diversidad de sustratos llevan a una gran diversidad de flora y fauna, considerada como el gran tesoro de este lugar.
En lo que a la flora marina se refiere, en la cara oeste de las Islas Atlánticas se pueden descubrir diferentes tipos de grandes algas pardas (géneros Laminaria y Saccorhiza) que conforman una especie de bosques submarinos. Una estampa que invita a perderse entre sus hojas. A esto cabe unir los fondos de maërl, que están compuestos por miles de algas coralígenas de diferentes especies y de pequeño tamaño.
La gran biodiversidad del Parque Nacional de las Islas Atlánticas se puede comprobar también en su rica fauna marina que varía según las zonas. Así, en las áreas rocosas y con mayor oleaje se pueden encontrar especies como percebes, mejillones, bellotas de mar o lapas, entre otras.
No menor importancia tienen las especies que habitan en la franja mareal, como los erizos de mar, las anémonas, bígaros, cangrejos, gobios o pulpos. Los fondos arenosos, por su parte, resultan propicios para bivalvos como berberechos, almejas y navajas, o para otras especies como el cangrejo ermitaño, el rodaballo o la sepia.
Ya en las zonas de mar abierto se pueden encontrar mamíferos como delfines, ballenas o focas. Una oportunidad de hacer inolvidables las prácticas del submarinismo en este entorno natural inigualable, si bien la pesca submarina y de recreo están prohibidas en el entorno afectado por este Parque Nacional.
La Ría de Vigo dispone de un rico patrimonio subacuático que te permitirá descubrir otra parte de la historia que ha marcado esa zona. De hecho, la práctica del submarinismo pone a disposición de las personas visitantes la posibilidad de descubrir los secretos de la batalla de Rande disponibles en el fondo del mar.
Se trata de una importante contienda naval librada en el estrecho de Rande y dentro de la ensenada de San Simón, en el interior de la ría de Vigo. Se produjo el 23 de octubre de 1702 y enfrentó a las escuadras de las coaliciones anglo-holandesa e hispano-francesa, dentro del contexto de la guerra de sucesión española.
De aquella cruenta contienda quedan algunos de los galeones saqueados y hundidos por el almirante Sir George Rooke al mando de la escuadra anglo-holandesa y que se pueden encontrar en el fondo de esta ría. En la ensenada de San Simón se descubrió un yacimiento de hasta 30 pecios, casi todos ellos ya localizados.
Una de las últimas expediciones arqueológicas realizadas en la zona llevó a la localización y catalogación de seis pecios más (entre los que se encontraban un buque francés de unos 25 metros y un galeón español de entre 30 y 40 metros de eslora) que pertenecieron a la mítica Flota de la Plata, atacada en el Estrecho de Rande tras viajar desde las Indias con sus bodegas repletas.
No obstante, entre las joyas de los fondos marinos de la ría de Vigo se encuentran el pecio del Southern Cross, vapor hundido a principios del siglo XX, o el buque corsario de la flota del británico Francis Drake, condenado al fondo de la ría en 1589 tras atacar Vigo.
Galicia está considerada como la mayor productora europea de mejillones, uno de los mariscos más preciados de este territorio. De hecho, cuentan con un sello de calidad y origen, la DOP Mexillón de Galicia. De sus cerca de 3.400 bateas inscritas distribuidas en más de 40 polígonos bateeiros, casi el 90% de ellas se encuentran en la zona de Rías Baixas.
La importancia de este sector deriva en que una de las actividades estrella que se puede disfrutar en este territorio pasa por experiencias submarinas únicas recorriendo las bateas. Para facilitar el conocimiento de la labor desarrollada por la industria mejillonera, muchas empresas locales disponen de catamaranes con visión submarina.
Así, se pueden descubrir, sin necesidad de una inmersión y de un modo cómodo, cómo se desarrolla el cultivo tanto de los mejillones como de las vieiras y ostras. Las explicaciones aportadas a bordo por el personal del barco se suelen complementar con una degustación de mejillones que se suele acompañar por vinos elaborados por bodegas de la zona.
Por otra parte, y para las personas amantes del submarinismo también se ofrece la posibilidad de realizar inmersiones entre bateas. Así, se pueden conocer de primera mano las distintas técnicas de cultivo del mejillón, al tiempo que se disfruta de la riqueza de los fondos marinos de las Rías Baixas.
Disfrutar de propuestas diferenciadas visitando pecios hundidos en las Rías Baixas es una de las actividades con las que las personas amantes del submarinismo podrán llevarse el mejor de los recuerdos de nuestros destinos econáuticos. Varias escuelas de buceo de la zona ofrecen inmersiones que permiten descubrir los secretos de estos pecios hundidos en las rías, especialmente en la de Vigo.
Las actividades se clasifican según el nivel de preparación de la clientela. Incluso se ofrecen cursos especializados en la navegación submarina entre pecios. A continuación, se detallan algunos de puntos de visita más solicitados.
Uno de los pecios más visitados es el Achondo Ondarribia, localizado entre 24 y 38 metros de profundidad, entre las Islas Cíes y las Estelas, frente a la península de Monteferro. Con casi 40 metros de eslora, sus restos todavía muestran su popa de acero, cubierta de madera, grandes mástiles y máquinas en el castillo de proa.
También en las Islas Estelas se puede visitar el pecio hundido Ybis. Se trata de un carguero que transportaba mineral de hierro y que encalló en esta zona en 1976. Sus restos se encuentran a una profundidad de unos 20 metros y se halla bastante deteriorado, si bien resulta posible bucear dentro de alguna de sus bodegas.
Para buceadores con una amplia experiencia se reserva los pecios María Varela e Itálica. El primero se localiza en el entorno de las Islas Cíes, este pesquero de hierro y madera se encuentra una profundidad de entre 40 y 51 metros. Se hundió en 1994 tras colisionar en plena navegación con un tronco a la deriva. El segundo de los pecios se hundió en 1922 y se encuentra encallado en el fondo arenoso del norte de la ría de Vigo, cerca de las Islas Cíes, a una profundidad de 60 metros.
En el entorno de las Islas Ons se encuentra el pecio Cordero González, pesquero hundido tras una colisión el 31 de agosto de 1975. La inmersión requiere unos conocimientos avanzados de buceo, ya que se halla a 25 metros profundidad. Se encuentra en excelente estado de conservación y resulta de gran interés para muchos buzos, que lo visitan por su foto al timón.
Dirigida a personas principiantes en el mundo del submarinismo, se encuentra la inmersión en la ría de Vigo para descubrir el pecio Southern Cross, encallado a unos 14 metros de profundidad en un fondo rocoso salpicado de arena. Se trataba de un vapor de carga refrigerada británico que encalló y naufragó en la entrada de la Ría de Vigo el 24 de diciembre de 1909.
También de dificultad baja es la visita submarina al Antártida/Antártico. Este pesquero de hierro quedó encallado en los alrededores de las Islas Estelas en 1987. Sus restos se encuentran a una profundidad máxima de 15 metros y presenta buena visibilidad.
Las personas que quieran iniciarse en el mundo del submarinismo también pueden optar por la visita al antiguo carguero panameño Afroditi-P. Encalló el 9 de marzo de 1982 en la entrada de la ría de Pontevedra, y más concretamente en la zona de Playa Major (Portonovo). Se encuentra a una profundidad media de 15 metros y se encuentra bastante desgastado.
Las actividades de inmersión en las Rías Baixas permiten a las personas visitantes descubrir la enorme riqueza de la fauna marina de esta zona. Especial interés tienen los archipiélagos del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas, muy adecuados para disfrutar de actividades como el submarinismo y también del snorkel.
Cabe tener en cuenta que para poder bucear en esta zona protegida es necesario solicitar los permisos pertinentes. Desde las empresas que ofertan este tipo de experiencias se encargan de estas cuestiones una vez formalizadas las reservas.
Las personas amantes del submarinismo tendrán la oportunidad de descubrir a través de las inmersiones en las Rías Baixas la gran variedad de mariscos y peces que se pueden hallar en esta zona. A los grandes mamíferos marinos, como ballenas, delfines, o incluso focas y cachalotes, se suma la amplia variedad de especies de mariscos que se pueden encontrar en estas aguas poco profundas y marcadas por su gran biodiversidad.
Entre las especies más comunes que se pueden encontrar en las Rías Baixas cabe mencionar distinto tipo de bivalvos –mejillones, almejas, berberechos…-, así como otro tipo de mariscos como bellotas y erizos de mar, lapas, bígaros, cangrejos, además de pulpos. Las estrellas de mar o los caballos de mar, además de peces de colores conforman parte del paisaje que se puede disfrutar a través de las inmersiones en las Rías Baixas. Unas experiencias que no se pueden desaprovechar.
Otro de los grandes atractivos de las Rías Baixas son sus aguas poco profundas y cristalinas. Esta condición, unida a una climatología favorable, favorece la práctica del turismo submarino, tanto a través del buceo como del snorkel.
Por ejemplo, en el caso del Parque Nacional de las Islas Atlánticas, los fondos marinos destacan por su claridad y por contar con una temperatura que suele rondar entre los 17 y los 20 grados. Esto propicia que lugares como las Islas Cíes o las Ons resulten idóneos para la práctica de este tipo de prácticas.
La ría de Vigo, y especialmente la Ensenada de San Simón, es de aguas poco profundas. Se trata de aguas muy suaves con alto índice de sedimentación, contando con un lecho lleno de lodos.
Del mismo modo, la Ría de Arousa se caracteriza por encontrarse resguardada del viento y del oleaje y por contar también con aguas poco profundas y bien iluminadas. Espacios como la ensenada de O Bao o las Islas de Arousa, A Toxa o Areoso conforman unos parajes paradisíacos donde contemplar la naturaleza de la ría en su estado más salvaje. Este último islote está bañado por aguas cristalinas que resultan ideales para la práctica del snorkel, disfrutando de la espectacular flora y fauna de este lugar.
Los destinos econáuticos Rías Baixas están incluidos dentro de los lugares de referencia de la Ruta WAOH (acrónimo de Wildsea Atlantic Ocean Heritage Route). Este recorrido tiene como principal objetivo reconocer aquellos lugares de la costa atlántica más adecuados para la práctica del submarinismo, surf, kayak y otros deportes náuticos. Galicia también está representada en esta ruta a través de las Rías Altas, la Mariña Lucense y Costa da Morte.
Desde 2017, la comunidad gallega se ha convertido en un espacio de referencia para la práctica de este tipo de disciplina dadas las condiciones propicias de sus aguas y su increíble entorno natural. La Ruta WAOH nació gracias al impulso de distintos países y al apoyo financiero de la Unión Europea. Reconociendo la idoneidad de los distintos lugares para practicar deportes náuticos, se fortalecen como destinos sostenibles de alta calidad, capaces de crear una identidad compartida basada en los hábitats marinos y en el inmenso patrimonio subacuático del Océano Atlántico.
Este marchamo de calidad pretende, además, atraer personas aficionadas y profesionales del buceo de primer nivel a zonas como las Rías Baixas. De este modo, la oferta deportiva se podría combinar con distinto tipo de actividades que dan a conocer el amplio patrimonio marítimo y la enogastronomía propia de este territorio. De este modo, se ofrecen experiencias basadas en un ecoturismo costero-marinero diferenciado.
La pesca deportiva conforma otro de los atractivos para las personas que buscan disfrutar de unas merecidas vacaciones en los destinos econáuticos Rías Baixas-Alto Miño. Uno de los motivos por los cuales se puede practicar esta disciplina es que la climatología de este territorio permite la práctica de los deportes acuáticos durante todo el año.
Temperaturas suaves, poca oscilación térmica, inviernos suaves y una humedad media/baja conforman las principales condiciones climatológicas de esta zona. A esta condición se unen las horas de insolación y las bajas precipitaciones que se registran durante todo el año.
Esta climatología privilegiada propicia la salida de los barcos para la práctica de la pesca deportiva. Además, las Rías Baixas destacan por una gran biodiversidad marina que hace más atractiva, si cabe, esta actividad. Es por ello, que nuestros destinos econáuticos disponen de una amplia oferta de actividades dirigidas a este público específico.
Las Rías Baixas destacan por un entorno natural inigualable. Además de sus impresionantes paisajes, también dispone de aguas tranquilas que resultan de lo más seguras para la práctica de la pesca submarina.
Una climatología favorable permite la desestacionalización de la práctica de la pesca submarina a otras épocas del año. Las temperaturas agradables y una escasez de vientos hacen que el verano se alargue en esta zona.
A la experiencia de la pesca deportiva cabe sumar un entorno natural privilegiado propiciado cerca de 400 kilómetros de litoral con más de medio centenar de playas enclavadas en una veintena de municipios costeros. Además, Rías Baixas dispone de numerosos puertos deportivos –varios de ellos con distintivo de calidad- y multitud de empresas especializadas que ofertan este tipo de servicios a las personas visitantes. Una amplia oferta que, además, se ve favorecida por unas condiciones climatológicas de lo más adecuadas. Es por ello, que nuestros destinos econáuticos se convierten en una gran opción para este tipo de prácticas deportivas.
Si además de ser amante del submarinismo o del snorkel en aguas cristalinas, también lo eres de realizar fotos submarinas, la zona de Rías Baixas se convierte en un lugar ideal para captar hermosas instantáneas. Las inmersiones o los recorridos entre pecios encallados en los fondos marinos hacen de esta zona un destino ideal para descubrir su impresionante variedad de especies únicas de fauna y flora.
Así, se pueden capturar desde singulares bosques de algas hasta hermosos caballitos de mar recorriendo las aguas de las Rías Baixas. Se trata de una experiencia que todo amante del submarinismo no se debe perder, especialmente en el caso del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas. Cualquiera de sus cuatro archipiélagos destaca por su impresionante riqueza marina y unas aguas que favorecen la biodiversidad.
Incluso desde la Federación Galega de Actividades Subacuáticas (Fegas) se desarrollaron iniciativas encaminadas a fomentar la fotografía submarina en las aguas de la comunidad gallega.
También impresionantes instantáneas se pueden tomar gracias a las experiencias en torno a los distintos pecios que reposan en los fondos marinos de las Rías Baixas. Unas actividades que se adaptan a todo tipo de necesidades: desde las personas que se están iniciando en el mundo del submarinismo hasta las más profesionales. Todo un mundo bajo el agua a disposición de los amantes de los fondos marinos.